Milo Manara es el pseudónimo del historietista italiano Maurillo Manara (Luson, (provincia de Bolzano), 12 de septiembre de 1945). Es considerado maestro indiscutible del cómic erótico, gracias a obras como "HP y Giuseppe Bergman" (1978), "El Clic" (1984) y "El perfume del invisible" (1986).
Ha dibujado centenares, miles de cuerpos femeninos a lo largo de su carrera, pero en el fondo todas las mujeres de Manara son una sola hembra imponente repetida sin cesar, cuerpos perfectos.
En el taller veronés del escultor malagueño Miguel Berrocal, un joven llamado Maurilio Manara pasa largas horas dibujando las instrucciones técnicas de ensamblaje y transporte de las esculturas. Durante un descanso de esa tarea el joven aprendiz curiosea en la biblioteca del escultor y descubre un cómic erótico que primero le ruboriza y luego le fascina: Barbarella, de Jean-Claude Forest. Y en ese mismo momento, contemplando las curvas de la aventurera espacial que acabaría encarnando la deliciosa Jane Fonda, Milo Manara toma una decisión definitiva: “descubrí que ese era mi trabajo, mi profesión, me dije que tenía que hacer exactamente eso y abandoné todo lo demás”.
En una curiosa entrevista le preguntan si en su adolescencia hubo sexo, drogas y rock&roll: Manara contesta que sexo nunca tuvo el suficiente, drogas las justas por la inevitable lisergia de finales de los sesenta, y más que asiduo a conciertos, lo fue a exposiciones: “para mis amigos sus estrellas eran las del rock, para mí eran las de la pintura”.
Años después, convertido en Milo, Manara llegaría a ser el dibujante de comics más importante de toda Italia, para algunos el mejor, y su carrera oscilaría siempre entre lo descaradamente comercial y lo puramente artístico. Es innegable que, además de ser un dibujante prodigiosamente talentoso, este autor es uno de los que más se ha preocupado por llevar el cómic a un lugar alto dentro del arte; pero también es cierto que cuando Manara ha encontrado fórmulas exitosas, no ha vacilado en explotarlas hasta la saciedad, dejando de un lado cualquier compromiso estético.
Todo culmina en 1969 con la publicación de Genius, su primer trabajo profesional. Estas obras cimentaron la fama de Manara como autor de cómic erótico, pero uno de los trabajos más importantes es: SensualitArs. En sus 44 páginas dibujadas mezclando estilos y materiales (óleo, carboncillo, acuarela) homenajea a las mujeres que sirvieron de inspiración y modelo a pintores y dibujantes a lo largo de la historia. En cierto modo es un cursillo acelerado de Historia del Arte: aparecen Lucrezia Buti retozando con Filipo Lippi, la Fornarina de Rafael, la goyesca maja desnuda, la amante-modelo-criada Hendrickje que trajo de cabeza a Rembrandt… Todas ellas vistas desde una perspectiva original y a menudo irónica, como en la Dánae de Klimt.
Mi dibujo preferido en cuanto a calidad del dibujo es la del pintor griego Apeles retratando a Kampaspe, la amante de Alejandro Magno. La versión manariana del momento en que pintor y modelo caen rendidamente enamorados es una escena de una extraña belleza.
Me parece genial que haya gente que haga cosas así :)
ResponderEliminar¡¡Viva el Arte!!